martes, 30 de marzo de 2010

"Travel to the moon" 17/36

Autor: Abril
Clasificación: General (lease bajo su propio riesgo [N/A])
Género: Drama, Romance.




"Travel to the moon"
Capitulo 17


A la mañana siguiente desperté, por una obvia razón, mas feliz de lo que en meses había estado.
La felicidad combinada con euforia recorría todo mi cuerpo, vi a Brendon tendido a mi lado y eso solo aumento mi emoción.
Me levante de un brinco para vestirme y posteriormente salí tomando la guitarra que estaba recargada y abandonada al lado de la puerta.
Vistiéndome en el camino note que la ropa me quedaba demasiado floja para ser mía y salí al cómodo columpio que se encontraba en el corredor de la entrada de la casa.
Sentándome sobre la madera y meciéndome lentamente hacia delante y hacia atrás tenia esa vieja guitarra en el regazo.
Vi el iluminado cielo, la claridad del día, pareciera que el mundo me sonreía, así me sentía, y sonreí sin poder impedirlo.
Era bueno estar feliz, era bueno contemplar el vecindario.
Lleve mis manos a las cuerdas y cerré los ojos, estaba tan eufórico que dilate un rato en concentrarme, en concentrar ese sentimiento correctamente, estaba dejando que mis manos se movieran solas (como la noche anterior) para producir un agradable sonido.
No necesitaba ver mis manos para saber lo que hacia, estaba dejándome llevar y mi boca se abrió empezando a canturrear…
Las cosas están formando a ser bastante raras. Muertes pequeñas en camas musicales. Así que parece que yo soy alguien que nunca se he encontrado…
Mi estúpida sonrisa resplandeció, seguí moviendo mis manos, el tono que estaba tomando esa canción improvisada me agradaba, era un estilo menos fatalista y deprimente al anterior, un gran cambio, un gran contraste, una inmensa felicidad… antes de estancarme en eso sentí que las ideas empezaban a amontonarse…
Las cosas han cambiado para mí, y eso esta bien. Yo me siento el mismo, yo estoy de camino, y yo digo. Yo quiero ir donde todos vamos, yo quiero ir donde todos nos sintamos el mismo…
Mis manos estaban temblorosas de la emoción y quería brincar, sonriendo por una aparente pero vergonzosa situación.
Me sentía sumamente estúpido pero no me interesaba. Estaba feliz y por ende todo lo demás valía un gran rábano.
Brendon me echo una lenta y minuciosa ojeada pero termino por ignorarlo.
Se sentó a mi lado escuchando con contemplación la canción que estaba ideando, sonrió con un marcado colorete en las mejillas, cuando termine me miro fijamente.
—espero no haber tenido nada que ver en tan enérgica y asombrosa melodía
— ¿estas bromeando? ¿Tu? Nah, por supuesto que no, dime ¿Qué tendrías que haber hecho tan bien como para ofrecerte esta canción?
El rubor de sus mejillas aumento cuando termine con mi sarcástico comentario y aunque apreté mis labios con fuerza no pude evitar echarme a reír.
— ¡cállate! —me ordeno rojo de vergüenza.
Disminuí un poco mis risas y puse una de mis huesudas manos en su suave rostro para darle un gratificante beso que duro más de lo usual y que provoco que al separarme viera un rostro iluminado por una bellísima sonrisa.
— ¿Qué haremos hoy? —pregunte regresando mis manos al instrumento, tocando varias notas cualquiera.
Bren puso los ojos en blanco y se quedo callado. Lo mire dudando que la dirección de su mirada tuviera alguna concreta, pareciese como si de pronto se hubiera quedado absorto en un trance.
—Hey ¿Estás…?
Levanto una mano en señal de que me callara y como no entendía lo que ocurría lo obedecí, detuve mis manos por un instante y entonces Bren abrió la boca.
—Espera… no pares…—lo mire, ¿recordando la noche anterior? Apreté los labios para no reírme—repite lo que tocaste
Con más dificultad de la debida conteste.
—no sé lo que toque, solo lo hice a la ligera
Sin regresarme la mirada asintió condescendientemente así que decidí dejarlo un rato con sus locuras, volví al ruedero impreciso de la guitarra y de pronto él sonrió. Eso era enfermizo, quizás estuviera zafado de un clavo y hubiera perdido la chaveta, miro el cielo…
Cuando el sol encontró a la luna, ella estaba bebiendo té en un jardín, bajo los paraguas verdes de los arboles, en medio del verano…
Lo mire, ahora sabia perfectamente el porque de su transe. Seguí aventando notas al azar mientras Bren buscaba mentalmente idear estrofas que tuvieran congruencia con las demás. Me miro con la misma sonrisa y regresándole el gesto se me ocurrió lo que seguiría…
En medio verano todos eran dorados en el cielo así que él dijo, "¿estaría bien si nosotros nos sentamos y hablamos por un rato mientras si a cambio de su tiempo, yo le doy esta sonrisa?”
así que ella dijo, "eso esta bien con tal de que usted pueda hacer una promesa de no romper mi pequeño corazón”
Bueno, él simplemente estaba esperando, entonces él se enamoró. El no supo cómo pero el no pudo sacarla.
Di el último acorde y sonreímos. Era un fuerte lazo donde mi retorcida mente cuadraba perfectamente con la suya, (no mas sana pero si mas limpia).
Me beso y luego acaricio con una mano floja su estomago desnudo.
— ¿sabes? Componer siempre me abre el apetito
—Bren, a ti todo te da hambre pero te lo otorgo, te invito a desayunar
Asintió demasiado efusivo mientras me tomaba de una mano y me dirigía a la casa, la guitarra cayo con un sonido hueco en el columpio y sin más lo seguí.
—por cierto, le prometí a Pete que iríamos hoy a su club ¿te parece la idea?
—claro, estoy tan feliz que podría dar clases de educación a alcohólicos
Brendon rompió a carcajadas.
—no es tan malo ir de vez en cuando a divertirse
—no, claro que no pero tampoco es malo tener mas personas con modales
—Eres un antisocial—me dijo con ese tono y con esa sonrisa que me hacían no querer llevarle la contraria
—bien—concedí—lo soy
—Lo sé, pero es lo bueno de ti—lo mire confuso—si, así no tengo nada de que preocuparme
— ¿preocuparte?
—si, de nadie, porque te la pasas enclaustrado en tu casa
Puse los ojos en blanco y antes de quererme defender, me tiro a la cama…

No hay comentarios: